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lunes, 29 de abril de 2013

Delirio

La música es ensordecedora, la verdad, con un esfuerzo inmenso intento escucharte, me acerco para poder enlazar las pocas palabras y letras que entiendo, me parecen aleatorias.

Pero no soy un idiota, entiendo la coquetería que emana de tus brazos en alto, y la sensualidad con la que los deslizan haciendo un amplio arco sobre tu pecho, haciendo la respectiva parada en tus oídos, nunca me gusto la música disco, pero agradezco a John Travolta por haberla hecho moda.

En medio del delirio, por un momento me pierdo y noto que me pides bailar, tú y yo sabemos que no lo hago para nada bien, pero de tú a tú, sé que lo quieres hacer porque no te importa lo mal que lo hago ¿y sabes? a mi tampoco.

Se que tratas de salvarme de la vergüenza, o tal vez compartirla, cuando pones tu dedo índice sobre mi cabeza para así, acompasar las vueltas que en mi torpeza parecen más un intento suicida de caer y atraer las miradas intolerantes.

Me importa poco, esas vueltas son en nuestro lenguaje artístico una tentativa a que hagas lo mismo, para poder ver en su plenitud tus piernas, nalgas, y caderas, toma en cuenta que estoy en peligro de invocar una erección autogestiva.

Cambia la música a un coro chillante: "me enamore de ti en un bazar", si fuera cómplice del dj pondría algo para bailar pegaditos, pero agradezco sus desatenciones a las mas elementales leyes del gusto y seguimiento musical, ya que la erección ya llego por la puerta y eso si, haciendo tanto escándalo como si trajera detrás diana de político.

Gracias a los dioses de la música, este infierno a terminado y comienza el del ardiente "luz, roja es la luz, luz de neon", pero la ardiente eres tu, tu cabello torcido, para tu mente retorcida.

Ya me canse, no porque el baile sea difícil, sino porque mis pies izquierdos me obligan a esforzarme más de lo posible, imagínate lo que sera de esos que compran en angelópolis pero que siguen comiendo memelas con dona Caila, con razón están históricos.

Han pasado dos canciones más, y no me detengo, porque si compartiéramos las sabanas ya habría minado de bailar.

Te soltaste el pelo, me gustaría que nos volviéramos a ver, pero se que no, la gente que baila solo no esta destinada mas que a ver siempre a su sola presencia.